Apremiado por los compromisos contraídos con el editor, Dostoievski tuvo que trazar la novela a medida que la iba escribiendo sin haber definido previamente el argumento. Tardó dos años trabajando en la novela y aunque no recibió por parte de la crítica excelentes comentarios él se sentía orgulloso del resultado.
En este relato, Dostoievski ataca continuamente el sistema burocrático de Rusia y la idea de crear un trabajo innecesario.
La obra
El príncipe Mishkin, último de su linaje, retorna a Rusia para recibir una herencia después de un largo período de reclusión en un sanatorio suizo, en donde estaba en un tratamiento contra la epilepsia, enfermedad que sufría Dostoievski.
Mishin, un hombre perfecto y bondadoso, se encuentra en el tren con Rogoshin, quien tiene una personalidad opuesta a la de Mishin. La demoníaca vitalidad de Rogoshin y la ilimitada bondad de Mishkin se dan encuentro en esta obra que plasma el egoísmo de una sociedad decadente y corrupta.
El montaje cuenta con la dirección de Ricardo Camacho, con diseño de Pilar Caballero.
El autor
Fedor Dostievski nació en Moscú en 1821 y falleció en 1881. Su literatura se caracteriza por explorar la sicología humana desde el contexto político, social y espiritual de la sociedad rusa del siglo XIX.
En la Academia Militar de San Petesburgo empezaron a salir a flote sus dotes de escritor, en donde escribió dos obras teatrales románticas, influenciado por el escritor alemán Friedrich Schiller. En 1844 abandonó el Ejército y empezó a escribir la novela “Pobres gentes”.
Después de haber sido condenado al exilio por conspirar contra el zar se desplazó a Kasajistán. Al final de su estadía en este lugar ya era un cristiano convencido y en sus libros criticaba el nihilismo y las corrientes socialistas. En obras como “Los endemoniados” y “Los hermanos Karamazov” deja ver sus convicciones religiosas.
En su segunda etapa literaria funda una revista en compañía de su hermano y se da a la tarea de escribir “Crimen y castigo”. Posteriormente publica las novelas “El jugador”, “El idiota”, “El eterno marido”, “Los endemoniados” y “Los hermanos Karamazov”, entre otras.
En sus obras aborda temáticas como la pobreza, la injusticia social, el amor y el realismo psicológico.
El Teatro Libre
Fundado en mayo de 1973 por jóvenes provenientes del movimiento teatral universitario de finales de los años sesenta y comienzos de los setenta con el propósito de formar a sus propios miembros. Otro de los objetivos fue realizar un repertorio en el que se alternara montajes internacionales con obras nacionales, emanadas principalmente de su taller de dramaturgia.
Durante los 30 años de trabajo han realizado 57 obras de 21 de autores nacionales y 35 extranjeros, entre los que se encuentran escritores colombianos contemporáneos como Jairo Aníbal Niño, Sebastián Ospina, Esteban Navajas, Jorge Plata, Eduardo Camacho, Piedad Bonnett, y otros dramaturgos clásicos como Shakespeare, Valle-Inclán, Pirandello, Miller, Molière y Chéjov, entre otros.
Las producciones del Teatro Libre se han presentado en 30 de los 32 departamentos de Colombia, así como en países como Venezuela, Ecuador, Costa Rica, México, Brasil, Paraguay, Estados Unidos, España, Francia, Bélgica, Suiza, Holanda e Inglaterra. Vale la pena destacar que fue el primer grupo colombiano en presentarse en la República Popular China, en 1983.
Hoy en día el teatro cuenta las sedes del Centro y Chapinero, donde además de presentar sus montajes, exhiben espectáculos como el Festival Internacional de Jazz, así como otros de música clásica y popular y danza.
Precio: 20 mil
