El Fausto gótico de Tomaž Pandur

El XV Festival Iberoamericano de Teatro de Bogotá, realizado durante el mes de marzo, cerró por todo lo alto en el Teatro Mayor con la obra Fausto del National Theatre Drama Ljubljana, y dirigida por Tomaž Pandur.

El hombre que vendió su alma al diablo, el que descubrió su otro rostro en el rostro de Mefistófeles (que en esta obra no llega solo sino como un nómada salido de la cinta Mad Max, acompañado de su mujer y sus hijos y seguido por una cuadrilla de diablillos), el que pide que a cambio de su alma se le devuelva la juventud y se le permita el acceso al placer y al conocimiento absolutos, es el protagonista de esta obra basada en el libro de Johann Wolfgang Goethe.

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Un montaje de proporciones míticas y un elevado concierto de tecnología y gótica belleza logró sorprender a los seguidores de Pandur y su “teatro de alta definición”, así como al público del Festival que se deleitó con este cierre del mes de las artes escénicas en Bogotá.

Esto se dice Fausto:

"Quien asiste al Fausto dirigido por este esloveno participa de una experiencia audiovisual única en donde la robustez y la solidez de esta obra clásica encuentra una renovación estética tan exquisita como poderosa." Revista Arcadia

"Y es justamente la belleza una de las preocupaciones en el entramado escénico de las obras de Pandur, en especial su novedoso Fausto. Una belleza gótica y expresionista, donde solo priman colores como el blanco, el gris y el negro, y un erótico rojo sanguíneo apenas sugerido en el maquillaje de sus personajes, que se desplazan por un espejo de agua." La pluma y la herida

"Es su manera de alejarse de ese teatro que refleja la cotidianidad, ya que su visión es que este arte debe crear su propia realidad, con imágenes y hasta olores que vienen de referencias de sus procesos de investigación." El Tiempo

Fotos: Paula Velásquez