Adiós a Alfonso Ortiz, reconocido actor y maestro colombiano

Alfonso Ortiz tuvo la distinción de haber actuado en dos de las obras más importantes de la historia del teatro colombiano: Guadalupe años sin cuenta y La siempreviva. En la primera, creación colectiva del Teatro La Candelaria dirigida por el maestro Santiago García, Ortiz interpretaba al Soldado Robledo, el ‘Colombian Tiger’, que en un desolador monólogo exponía los efectos psicológicos de la guerra.  

En La siempreviva, escrita y dirigida por Miguel Torres, Ortiz encarna a Sergio, típico rebuscador colombiano, que trabaja bien sea de payaso o de mesero y que es una de las almas que habita la casa en la que se desarrolla este drama sobre una de las desaparecidas en la toma y la retoma del Palacio de Justicia.  

Estos dos papeles fueron una muestra del talento de Ortiz, actor colombiano que falleció en la noche del 12 de noviembre.  

Ortiz tuvo una carrera de más de cuatro décadas en la que, además del teatro, tuvo una destacada presencia en el cine y la televisión colombianos. El artista también tuvo una larga trayectoria como maestro de actuación con su taller Caja de Herramientas.  

El Teatro Experimental La Mama fue el lugar en el que Ortiz comenzó su carrera de actuación, trabajando en obras como El abejón mono, del director Eddy Armando. Su carrera en las tablas continuó en grupos como el Teatro La Candelaria y El Local.  

Paralelo a su carrera actoral, Ortiz trabajó como maestro en Colombia, en la extinta Escuela Nacional de Arte Dramático y en la Universidad Nacional, y también en México. 

En televisión, actuó en series como De pies a cabeza, Pobre Pablo, Los Reyes, La hija del mariachi; mientras que en cine se destacaron sus papeles en La vorágine y Perder es cuestión de método.  

Su huella en la cultura colombiana se amplió gracias a su trabajo en Caja de Herramientas, en el que impartió sus enseñanzas a un numeroso grupo de destacados actores nacionales.  

En el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo, Ortiz se presentó con La siempreviva, en la versión para sala que Torres estrenó en el 2012, y en el homenaje a La Candelaria que se realizó en el 2011 con la lectura dramática de Guadalupe años sin cuenta.

El Teatro Mayor se une a la celebración de la vida y la obra de Ortiz.