El repertorio dorado de Il Pomo D’Oro

El 1666, el compositor italiano Antonio Cesti estrenó su ópera Il pomo d'oro, una producción en cinco actos que era tan larga que se tuvo que presentar en dos días. La historia se centraba en el juicio de Paris, en el que el mítico guerrero tiene que escoger cuál de las tres diosas (Venus, Juno y Palas) era la más hermosa para entregarle la manzana dorada de la discordia.

La pieza se estrenó durante las celebraciones de la boda del emperador Leopoldo I y Margarita Teresa de España. Y, además de su duración, fue particularmente costosa: requería de 24 escenografías diferentes, además de 300 caballos y fuegos artificiales con 73.000 cohetes.

Es una ópera que se representa pocas veces, pero 346 años después, su nombre sirvió de referente para bautizar a una orquesta que en menos de una década ha logrado crear su propio legado. Se trata de Il Pomo D’Oro, que se fundó en el 2012 y que, además de su peculiar nombre, se destaca por sus auténticas interpretaciones de ópera y de obras instrumentales de los periodos clásico y barroco.

El ensamble, que ha logrado convertirse en invitado recurrente en las principales salas de concierto de la escena clásica, también suele compartir escenarios con estrellas del género. Una de sus colaboraciones más exitosas ha sido con la multipremiada mezzosoprano estadounidense Joyce DiDonato, junto a quien estrenó en el 2017 el espectáculo In War & Peace: Harmony through Music (En guerra y paz: Armonía a través de la música).

La puesta en escena, que se podrá ver en Teatro Digital durante una semana, desde el 2 de abril, a las 8 p. m., invita a una reflexión sobre los contrastes de este mundo a partir de un repertorio de arias barrocas de compositores como Händel, Leo, de Cavelieri, Pärt, Purcell y Gesualdo.

Para este montaje, el director es el clavecinista ruso Maxim Emelyanychev, quien desde el 2016 es el director titular de Il Pomo D’Oro. Con solo 32 años, Emelyanychev ha logrado sobresalir por su dinámica interpretación del clavecín. De hecho, desde los 12 años, el músico ruso ya recibía invitaciones de orquestas internacionales, tanto sinfónicas como barrocas.

“Ellos capturan la pasión del repertorio barroco, que es tan vibrante y lleno de vida… Han sido grandiosos compañeros en el sentido de experimentar sobre qué podemos hacer para empujar hacia adelante esta idea de cómo se puede ver distinto un concierto de música clásica”, dijo DiDonato sobre su trabajo con la orquesta en una entrevista con EL TIEMPO.

Además de En guerra y paz, que ganó el premio Gramophone en el 2017, Il Pomo D’Oro y DiDonato han trabajado en otros proyectos como una grabación de Agrippina, de Händel, y este año estrenarán el recital My Favorite Things.

Por otro lado, Il Pomo D’Oro es embajador oficial de El Sistema Grecia, un proyecto humanitario para proporcionar educación musical gratuita para niños en los campos de refugiados griegos. La agrupación da conciertos de caridad y, frecuentemente, ofrece talleres y clases de música según el método El Sistema en diferentes campos de refugiados del país.