"Yo he visto muchas cosas en mi vida pero Zorba el griego es muy especial." Marcia Haydée

En 1976 y hasta 1996, Marcia Haydée fue directora del Ballet de Stuttgart, y simultáneamente, entre 1993 y hasta 1996, lo fue del Ballet de Santiago por primera vez. Marcia Haydée bailó con partenaires como Rudolf Nureyev, Mikhail Baryshnikov, Anthony Dowell y Jorge Donn; entre muchos otros. También ha producido sus propias versiones de La Bella Durmiente, Coppélia, El Pájaro de Fuego, Giselle y Enas.

En julio de 2004 asumió nuevamente como Directora Artística del Ballet de Santiago y ha creado para la Compañía la obra Carmen en dos actos con la música completa de la ópera de Bizet, y La Cenicienta, con vestuario y escenografía de Raymundo Larraín. Este 2016 vuelve a Bogotá junto a la Compañía para presentar Zorba, el griego.

 

¿Cuál ha sido el reto más grande como Directora Artística en el Ballet de Santiago?

Yo estoy como Directora Artística desde 2004, y para mí lo más importante todos estos años ha sido abrir la Compañía a otros tipos de coreografía. Antiguamente la Compañía era especialmente clásica, y desde que llegué empecé a traer otros repertorios, como el Zorba de Lorca Massine, cosas de Béjart; hemos hecho cosas más contemporáneas, mezcladas con el repertorio clásico de MacMillan, Neumeier, Cranko; todos ellos. Eso para mí fue la apertura de esta Compañía para cosas más contemporáneas, porque yo creo que en las compañías los bailarines deben ser capaces de hacer de todo. No es más un tiempo en el que las compañías son solamente clásicas, hoy en día ya no existe eso.

¿Por qué decidieron hacer una versión de Zorba el griego?

Pidieron que hiciéramos Zorba el griego, porque es un ballet que tuvo un suceso muy grande en todos los años que existió, y que ha estado acá en Chile. Zorba el griego es un ballet que tuvo suceso en el mundo entero. El estreno fue en los años 80, en Verona, y yo vi; no el estreno, estreno, pero unos espectáculos después y me fascinó el ballet y la música de Theodorakis. Y yo ya tenía una conexión muy grande con la obra porque había leído el libro y había visto la película con Anthony Quinn. Fue muy emocionante de ver después como ballet esa película que a mí me gustó mucho. Es una coreografía que Lorca Massine hizo y tiene la música de Theodorakis que escribió el famoso sirtaki para la película, que es cuando Anthony Quinn baila con Alan Bates en la playa, y Anthony Quinn dice: “si estás deprimido, si estás triste, si estás sintiéndote mal, baila; el mejor remedio que hay es el baile.” Entonces para mí Zorba es un ballet muy especial, no solamente es una coreografía espectacular, hay la música de Theodorakis y yo soy una admiradora total de ese compositor; hay el coro, se hace con coro, con la orquesta, es de verdad un espectáculo muy, muy lindo. Entonces cuando pidieron que hiciéramos Zorba el griego, yo dije inmediatamente que sí, porque yo encuentro que es para todo el público, el público se divierte, el público en el final del espectáculo quiere casi bailar con los bailarines, porque la música es algo tan, tan conocida, el sirtaki, que hace que cualquiera quiera bailar. Encuentro que es un ballet que enseña la compañía muy bien, la compañía lo hace muy bien, y el público disfruta mucho.

¿Cómo fue el trabajo junto a Lorca Massine en el momento de ensayar las coreografías y preparar la obra?

Fue fantástico, Lorca es una persona muy impresionante, es una persona que tiene una energía muy grande. Yo conocí a su padre que fue Léonide Massine, y me acuerdo que en esa época Lorca Massine era un jovencito, que siempre miraba los ensayos. Entonces de tenerlo a él haciendo la puesta en escena acá con nuestros bailarines, él quedó fascinado con los bailarines acá, dijo que de verdad la Compañía que mejor baila Zorba el griego es la nuestra.

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¿Qué se le exige a un bailarín para que pueda formar parte del Ballet de Santiago?

Para mí, en cuanto yo soy la directora, es muy importante que tengan una técnica, que tenga el nivel de la Compañía, pero tienen que tener mucha personalidad, tiene que tener una inteligencia para que puedan hacer los diferentes tipos de coreografía que hacemos, tienen que estar abiertos para todo. Si es un bailarín que solamente quiere hacer el ballet clásico no me sirve, porque yo quiero bailarines que son artistas, que puedan hacer hoy Béjart, mañana Cranko, pasado mañana Lorca Massine; hacer de todo, que sea abrir el campo de los bailarines, es lo que es para mí más importante en esta Compañía.

¿Qué viene para el futuro del Ballet de Santiago?

El año que viene vamos a presentar la coreografía de Mauricio Wainrot, después hacemos mi versión de El lago de los cisnes, después tenemos La Flauta Mágica de Maurice Béjart; que somos la única Compañía que en el momento va a tener La Flauta de Béjart; esto es una situación increíble para nosotros. Raimundo, una producción nueva, con coreografía de Luis Ortigoza, y un espectáculo de diferentes coreógrafos en el que tenemos El Bolero de Béjart, tenemos un ballet de Bigonzetti y un ballet en el que tenemos la Compañía Contemporánea junto con nuestra Compañía, en una coreografía de Mathieu Guilhaumon, que es el director de la Compañía Contemporánea de Chile.

De la última vez que vinieron a Colombia a esta visita, ¿qué expectativas tienen con esta presentación?

Yo creo que el público de Colombia nos recibió muy bien cuando hicimos El Cascanueces, fue de verdad un placer muy grande estar en Colombia, bailando con ese público tan lindo, y la Compañía ahora está disfrutando que va a volver y tengo certeza de que vamos a tener a un público también muy entusiasta, porque este espectáculo de verdad es algo que es muy fuerte.

¿Cuántos bailarines vienen a escena para esta presentación?

Viene toda la Compañía. Los principales son Rodrigo Guzmán que hace el Zorba, José Manuel Guiso que hace Manolio, Natalia Berríos que hace Marina, y después Dolores Salazar que hace Madame Hortense y John que es el francés Gabriel Bucher.

 

Marcia Haydée estudió en el Royal Ballet School y posteriormente ingresó a la compañía del Marqués de Cuevas. En 1961, John Cranko la llevó al Ballet de Stuttgart como Primera Solista y se transformó en su musa inspiradora. Otros artistas como Kenneth MacMillan, John Neumeier y Maurice Béjart también se inspiraron en su arte para crear obras.

 

¡No te pierdas Zorba el griego del Ballet de Santiago del 8 al 11 de diciembre!

 

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