Disfrute en vivo una transmisión de ensueño de la compañía más antigua de danza de Inglaterra

Como un engranaje de una locomotora o el mecanismo que impulsa un reloj. Así de bien aceitado y coordinado es el espectáculo Draw from Within, que la compañía británica Rambert Dance Company creó, de la mano del coreógrafo belga Win Vandekeybus, especialmente para transmitir por plataformas digitales.  

Es un espectáculo que nace por las limitaciones que ha impuesto la pandemia del coronavirus, pero que ha convertido esa limitación en fuente de inspiraciones. Es así como Vandekeybus diseñó una apasionante amalgama de coreografías, diseño de espacios y movimientos de cámara.  

La producción tendrá este sábado 26 de septiembre una función especial en vivo para Latinoamérica, a las 7 p. m. de Colombia (9 p. m. de Chile). Esta función se podrá ver en el continente gracias a la alianza entre el Festival Santiago a Mil de Chile y el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo.  

Los interesados podrán adquirir las entradas, por un costo de 13 dólares, en la tiquetera de Santiago a Mil. Adquiere aquí tus entradas. Luego, deberán registrarse en la página de la Rambert Dance Company y redimir su entrada.

La compañía británica apostó por una combinación del aspecto vivo de las artes escénicas con la posibilidad de la mirada única que da el mundo cinematográfico. Por un lado, la pieza se interpreta en vivo, reflejan esa experiencia de asistir a una función convencional de danza, que empieza en un horario específico.  

Por otra parte, el grupo diseñó una partitura especial para el equipo de camarógrafos, que con sus lentes se ubican en ángulos privilegiados que se aprovechan del diseño escenográfico. Draw from Within logra crear y desaparecer universos en segundos, como si se estuviera viendo un sueño proyectado en una pantalla.  

Más allá de esos logros técnicos, en la pieza palpita la sangre de la danza contemporánea. Los bailarines logran dibujar virtuosas coreografías, que van de la desolación a la esperanza, enfatizando esa idea de contrastes que buscaba Vandekeybus.  

Hay otro sentimiento que es vital durante todo el espectáculo, y es la catarsis, algo que el coreógrafo belga espera despertar en sus espectadores. “En la danza no tenemos que llevar un gran mensaje al mundo, solo tenemos que hacer que la gente sienta algo que tal vez ha olvidado”, le dijo Vandekeybus al diario The Guardian. 

Si usted quiere experimentar este ambicioso viaje que creó la Rambert Dance Company, le recomendamos que configure con tiempo de anticipación su dispositivo y se ponga en manos del poder de la danza.