‘La Bella Otero’: detrás de una de las grandes producciones del Ballet Nacional de España en el Teatro Mayor

Una virgen en andas entra en el escenario, rodeada de una decena de bailarines y bailarinasque recrean con su cuerpo el ambiente, al mismo tiempo nostálgico y festivo, de las fiestas religiosas de un pueblo a finales del siglo XIX. Ese pueblo es Valga, una aldea de las RiasBaixas, en la costa de Galicia, que se volvió famosa por ser el lugar de nacimiento de Carolina Otero, una de las más famosas y solicitadas bailarinas de cabaret de la Belle Époque.

Otero, quien cultivó una imagen de femme fatale a principios del siglo XX, llegó incluso a ser cercana de grandes personalidades de la realeza de la época. Sin embargo, tras gozar de la fama, se retiró de los escenarios a sus 40 años y pasó más de cinco décadas viviendo en soledad antes de su muerte.

Gracias a la magia que solo ocurre en los teatros, el escenario se comienza a transformar para hacer que el público viaje a la vida de la bailarina. Lo que era ese pueblo bucólico, se convierte en el gran Casino de Montecarlo, en un café de Marsella, en los grandes teatros de Nueva York y San Petersburgo, y en París, a través del mítico cabaret de Folie-Bergere y el Bois de Boulogne. 

El Ballet Nacional de España, la compañía que hace realidad este espectáculo, llegó a Bogotá para presentar ‘La Bella Otero’ con un equipo de 86 personas entre artistas, cuerpo técnico, maquilladores y vestuaristas, que sumados a los 54 músicos de la Orquesta Sinfónica Nacional de Colombia y al director musical crean un espectáculo con 141 personas en escena.

Cada uno de los detalles que aparecen están hechos para ambientar ese viaje por esa Europa derrochadora y optimista de principios del siglo XX. La diseñadora Yaiza Pinillos, por ejemplo, quien hizo el vestuario de la obra, diseñó cerca de 200 piezas para los bailarines que participan en las 14 escenas de ‘La Bella Otero’, se inspiró en las pinturas de Goya para recrear los colores de la Galicia Rural y en uno de los cuadros más famosos de La Bella Otero, de Léopold Reutlinger, para hacer un traje de estilo bizantino para la protagonista de la historia. 

La historia de esta obra de ballet, donde se encuentran la tradición y la vanguardia, nació de la visión de Rubén Olmo, actual director del Ballet Nacional de España y coreógrafo de la obra. “Tenía muchas ganas de crear una coreografía sobre ella, pero sabía que tenía que ser con un gran ballet”, explica. Cuando en 2019 asumió como director de la compañía, decidió comenzar con la tarea y convocó al escritor y actor y director teatral Gregor Acuña-Pohl para que escribiera el guion de este ballet dramático. Pohl pasó varios meses leyendo biografías de la Bella Otero, buscando su aura en la prensa de la época, visitando el museo dedicado a ella en Pontevedra y siguiendo sus huellas por los teatros, cafés y cabarets de toda Europa. 

“Al leer una y otra vez sus biografías yo buscaba aquellos momentos que fueran más representativos y pudieran expresarse mediante la danza”. Entre los escenarios que eligió se encuentran una romería gallega; la ópera de Barcelona, donde asiste a la ópera ‘Carmen’, de Bizet; un café cantante, lo que sería un tablao flamenco actual; el Folies Bergère, el cabaret más famoso de París; el restaurante Maxim’s; y el casino de Montecarlo”, explica el escritor. 

Finalmente, la historia tomó forma a partir de la coreografía de Olmo, quien decidió incluir diversos estilos de danza tradicional española —desde la muñeira gallega hasta el flamenco— y elementos de danza moderna y conceptual. Sin embargo, quedó en manos de dos grandes bailarinas españolas, Patricia Guerrero y Maribel Gallardo, la tarea de representar a La Bella Otero en los diferentes momentos de su vida: “Fue una mujer con mucho carácter, mucha confianza en sí misma y un instinto de supervivencia brutal”, dice Guerrero. Y Gallardo añade: “Fue una mujer transgresora ante una sociedad machista”.

Una gran producción musical

Mientras los espectadores ven este viaje biográfico en el escenario del Teatro Mayor, en el foso de la orquesta, la Orquesta Sinfónica Nacional de Colombia, acompañada por músicos invitados del Ballet Nacional de España, interpretarán la música de la obra. Se trata de una producción colectiva entre varios compositores de diversos estilos: Manuel Busto, Alejandro Cruz y Agustín Diassera en la parte sinfónica; Diego Losada, Víctor Márquez, Enrique Bermúdez y Pau Vallet, con obras para guitarra flamenca, y el grupo de rock celta Rarefolk.

Esa diversidad de estilos y ritmos, permite acercarse a las diferentes facetas de Otero, pero también a la expresividad de la época, en la que se vivía una fuerte explosión creativa. Todo en función, además, de los momentos dramáticos de la obra. 

“Mi principal reto a la hora de desarrollar los arreglos y las orquestaciones fue que no perdieran un ápice de la frescura y personalidad original, pero quedaran insertadas como parte natural de la obra”, señala Manuel Busto, quien además estará dirigiendo a la Orquesta Sinfónica Nacional de Colombia en las presentaciones de ‘La Bella Otero’ en el Teatro Mayor. 

¿Cuándo?

Jueves 4 de mayo, 8 p.m.
Viernes 5 de mayo, 8 p.m.
Sábado 6 de mayo, 8 p.m.
Domingo 7 de mayo, 5 p.m.

¿Dónde?

Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo

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